miércoles, 30 de diciembre de 2009

Va a servir


Todo esto q me pasa, va a servir
aunque me duela hoy el alma va a servir
deja profunda enseñansa el sufrir
la muerte impulsa mis ganas de vivir.

El frio enseña a valor el calor
la cobardia a respetar el valor
el odio hace mas fuerte el amor
el llanto ayuda a deshogar el dolor.

Todo esto q me pasa, va a servir
aunque me duela hoy el alma va a servir
deja profunda enseñansa el sufrir
la muerte impulsa mis ganas de vivir.

Traicion enseña a valorar la lealtad
y la opresion a buscar la libertad
y aunque es dificil ver en la oscuridad
la noche acaba y llega la claridad.

La vida tiene colores para ti
es tan hermosa q es corta, se feliz
me lo enseño un perro amigo y aprendi
y aunque mi perro no hablaba yo entendi.

Todo se muere y vuelve a renacer
nada se escapa es inutil correr
igual q un niño aprendi a caminar
y cada golpe me enseño a crecer.

viernes, 25 de diciembre de 2009

:¡Feliz Nochebuena, trabajadores!


¡Feliz Nochebuena, trabajadores de México y del mundo! Cómo la pasarán esta noche y no me refiero a los trabajadores privilegiados, que los hay, sino a los de “mano dura”, encallecida por el esfuerzo cotidiano, sudorosos y aguerridos. El niño que nació en un pesebre hace más de dos mil años era hijo de trabajadores y trabajador Él mismo, del cuerpo y del alma, del espíritu. Cómo la pasarán. Lo digo pensando en cómo a su vez están el mundo y el país, envueltos ambos en un torbellino de incertidumbre. Tampoco me refiero a los que trabajan para pervertir la grandeza de su oficio, dañando y hasta matando a su prójimo. Pero la verdad es que en medio de la violencia, de la crisis económica, del abuso del poder, del deterioro de las instituciones y del ejercicio político, él único que se salva es el trabajador. Se salva porque contribuye a la salvación de los demás. ¿De qué manera? Sobre sus hombros pesa y descansa el bienestar de los otros. ¿Qué daño hace él? Con sus instrumentos de trabajo contribuye a lo que los humanos llamamos progreso.

Son los perversos y torcidos de conciencia quienes abusan y se enriquecen a costa del oprimido; utilizan a los trabajadores en su beneficio y hasta como punto de referencia de su ocupación, de su quehacer particular u oficial. Aparentan interesarse en los trabajadores. Pero es el jornalero, el obrero, el que hace girar con su esfuerzo las pesadas ruedas de la historia. El resto de la gente usufructúa en su beneficio tal esfuerzo, unos de buena fe y con responsabilidad, otros de mala fe. ¿Qué noche pasarán hoy los trabajadores de México? El pesebre y la cruz del niño cuyo nacimiento hoy se festeja son el fruto del trabajo material. Se dice, y ha resonado a través de los siglos, que éste niño ya hecho hombre y cumplida su misión vino a redimirnos; a redimir a toda la Humanidad, por supuesto. Sin embargo, entre las luces y sombras del conglomerado humano hay de todo. Y algunos parecen irredentos. ¿Lo serán? ¿Pero quiénes son los redimibles y en qué sentido? Al calor de la noche pasada y en el transcurso de este día, que es Navidad, me voy convenciendo de que junto con la redención espiritual está la social. Son inseparables igual que el sonido es inseparable del instrumento que lo genera. ¿Quiénes son los redimibles? ¿Quiénes son los rescatables a los que hay que sacar de donde priva la injusticia? No me parece que sean los ricos, ni los satisfechos, ni los felices o que se creen felices y que en rigor son conformistas. No. Los rescatables son los trabajadores. El mundo social es una máquina que algunos han llamado de explotación. He allí a los beneficiarios del progreso, he allí a los que pregonan el cambio social pero conservando las mismas reglas del deterioro al que hemos llegado.

Por eso, precisamente por eso, los trabajadores se levantan, se ponen de pie. Y se los critica porque en ocasiones manotean y gritan. ¡Qué notable, no se los criticaría si lloraran! ¿Se los compadecería, acaso? Compasión que de poco ha servido para equilibrar la balanza. La cena de anoche y la comida del día de hoy no fueron ni serán las mismas para todos. Hay árboles de Navidad luminosos y los hay vacíos. Los hay que lucen a sus pies regalos generosos y magníficos. Hay mesas en que las botellas de vino se han descorchado y se descorchan en medio de un gran alboroto y regocijo. Y las hay en que la tristeza predominó y predomina. La tristeza, la desilusión y el pesimismo. ¡Qué Nochebuena y qué Navidad para los hombres, las mujeres y los niños víctimas directas o indirectas de la violencia, de la pobreza, de la injusticia! Si Jesús no fue hijo de Dios merecía serlo, dijo Renan, y su poder de fe y de esperanza debe imperar en la conciencia de la clase trabajadora. Es decir, la justicia se obtiene luchando, desde luego no a patadas ni con la violencia física. Pero sí luchando. El niño que nació en un pesebre, hijo de trabajadores y trabajador Él mismo, fue un hombre siempre en pie de lucha y profundamente comprometido. Su mensaje no es el de la resignación y en este sentido yo interpreto el valor de la fe y la esperanza: como optimismo fundado y razonado.

Cruzarse de brazos ante la injusticia es morir antes de tiempo. La Nochebuena y la Navidad reconfortan a todos, pero hay “reconfortados”, lo pongo entre comillas, que huelgan en su comodidad, en su riqueza, en su poder. Los otros, los que no se cruzan de brazos, son sin duda los elegidos y cristianamente hablando los bienaventurados.
A pesar de todo: ¡Feliz Nochebuena, trabajadores!

RAÚL CARRANCA Y RIVAS

miércoles, 16 de diciembre de 2009

95 Años del Sme


Un paso al frente y una profesía que se cumple...


"Uno a uno ibamos llegando, "los conjurados" procurando pasar inadvertidos por las gentes que transitaban por aquellos barrios de dudosa fama en aquel entonces.

Con cautelosa manera formabamos corrillos, procurando hablar en voz baja y sin ser vistos desde la calle, pero eso sí, unos a otros noss identificabamos sin reserva alguna "por si las dudas", pues había por aquel tiempo unos polícias secretos de la Cía., conocidos como la mano negra.

...los más connotados nos explicarón la situación: aviase ya dado cuenta la empresa de las primeras manifestaciones de la gestación de la rebeldía que cundía entre sus trabajadores, por mejorar su situación y con soberbia inaudita les planteaba el siguiente dilema a escoger o "SOCIEDAD O TRABAJO"

¡¡¡Compañeros!!!... los hemos citado con el fin de organizar una "sociedad", si pero de un nuevo tipo, una sociedad de Resistencia que sería más que mutualista... una sociedad de Resistencia que llamaremos SINDICATO para prestar ante la compañía de luz nuestro "pliego de peticiones."

... Pero... es necesario unirnos primero; organizarnos en debida forma, para tener un cuerpo directivo de nuestros primeros trabajadores... el peligro acecha y ya saben las consignas de la Cía... "solo hay dos sopas" a elegir: o SOCIEDAD O TRABAJO... no queremos obligar a nadie a esta aventura, sino que con toda libertad, y consultando ante su conciencia decidan... formense en una fila y a la voz de ¡¡¡UN PASO AL FRENTE!!! saldrán de esa fila los compañeros que esten dispuestos a todo... ¡¡¡porque... SINDICATO y no otra Sociedad saldrá de aquí en adelante!!!

Los que por razones muy personales no deseen seguirnos, pueden quedarse en su lugar con la seguridad de que no serán obligados a nada.

Todos instintivamente, volvimos la vista hacia atrás, para ver quién o quienes se habían quedado sin dar el paso al frente, pero con gran satisfacción, vimos que todos, absolutamente todos, habíamos avanzado un paso adelante"


Tomado de la revista "LUX" Noviembre 1956